En todo este proceso Margarita María contó siempre con el apoyo y la colaboración de su hermana gemela, Leonor, también monja, aunque en la Congregación de las Carmelitas de la Caridad-Vedruna.
Desde 1913 estaba destinada en Suipacha, Argentina, pero las gemelas mantuvieron una constante correspondencia. En sus cartas las muestras de afecto fraterno –con un cariñoso sentido del humor– se entremezclaban con confidencias y consultas de carácter espiritual. Trataban especialmente temas relativos a las misiones (“el asunto de actualidad gemeluna”). Se comunicaban iniciativas, discutían proyectos, intercambiaban materiales y publicaciones… De hecho, Leonor estableció en América las Obras Misionales Pontificias.
Falleció en Suipacha el 28 de enero de 1931. Actualmente se halla en proceso de canonización.