En la 26ª edición de los Encuentros de Antropología y Misión, que se celebra este fin de semana en Madrid, Mundo Negro ha concedido el Premio a la Fraternidad 2013 a la Hna. Angélique Namaika, que dedica su vida a atender a los refugiados, especialmente mujeres, en la República Democrática de Congo.
Es enviada a formarse a Doruma, donde permanece durante doce años. En 2003, después de un año y medio en Bangado, es destinada a Dungu, donde se vuelca en el trabajo con las mujeres desplazadas a causa de la violencia que sufre la zona, muy rica en recursos minerales –especialmente oro y diamantes– y afectada por la presencia de numerosos grupos armados que acosaban severamente a la población. Entre estos, destacaba el Ejército de Resistencia del Señor (LRA) de Joseph Kony. En el año 2009, la propia Hna. Angélique Namaika tuvo que huir de la zona durante varios meses.
La revista Mundo Negro ha concedido el Premio a la Fraternidad 2013 a esta religiosa, por ser un símbolo del trabajo que la Iglesia desarrolla en uno de los rincones más conflictivos del continente africano, y junto a uno de los colectivos –el de los refugiados– que con más facilidad pasa al olvido de la opinión pública.
El Encuentro de Antropología y Misión se centra este año en el tema de los “Refugiados, voces para la esperanza”.
Comenzará el sábado a las 10:30 de la mañana con la Conferencia “Refugiados en África. Realidad, causas y consecuencias” a cargo de Pablo Funes, responsable de África de Entreculturas. Continuará con una mesa redonda en la que se expondrán cuatro miradas sobre el fenómeno.
Por la tarde, Ramón Arozarena hablará sobre “El silencio de los desplazados internos en la Región de los Grandes Lagos” y la jornada finalizará con el testimonio de la Hna. Angélique Namaika, religiosa agustina de la República Democrática del Congo que ha sido galardonada con el Premio Nansen 2013 que concede ACNUR por el trabajo a favor de los refugiados.
Noticia extraida de CONFER